Era noche estrellada, lo recuerdo
una brisa soplaba desde el mar
se oían risas de fondo en la distancia
y un perfume a caléndulas, flotar.
Mi corazón brincaba acelerado
las manos me temblaban sin cesar,
no se si era de miedo o de alegría
no sabía que ocurría en realidad.
Veía mariposas que volaban
despiertas a deshoras , sin razón
junto a brujas montadas en su escoba
cantando a voz en grito una canción
Los elfos y los duendes correteaban
jugando al escondite sin parar
y un hada sonreía tras un seto
con un gesto invitándome a jugar.
Los faunos me contaban sus secretos
la luna tarareaba una canción
Morfeo me acogía en su regazo
sumiéndome en un dulce sopor
El canto de los grillos se mezclaba
con los latidos de mi pobre corazón,
se oía un rumor de aguas, ya clareaba
la noche se volvía a su rincón.
Hipólita y Helena filtreaban
jugando con Lisandro y Oberón
Y yo , aun ahora me pregunto
acordándome de Shakespeare, que pasó
¿Fue el sueño de una noche de verano,
o fue verdad que todo sucedió?
Con esta duda acabo mi poema
y que el final, lo ponga hoy el lector
Precioso Julia.Yo creo que fue un sueño que por unos instantes se hizo realidad para volver a ser sueño.Besicos
ResponderEliminarUna mágica noche de ensueño, con sus personajes de fantasía de un corazón que se agita al ritmo de la alegría.
ResponderEliminarUn abrazo.
No se si era sueño o realidad pero a mi me has hecho viajar a un lugar precioso. Besos
ResponderEliminarHola Julia!! precioso poema que, deseo que no fuera un sueño sino una realidad por lo bonito que es.
ResponderEliminarBesos.
Hola Julia, que poema más hermoso sobre una noche mágica y real.
ResponderEliminarUn placer leerte, he pasado por aquí de casualidad, y es un placer.
Me quedo encantada, me ha gustado tu forma de hacer.
Un abrazo y feliz noche.